Roma, la capital italiana, ofrece muchas cosas que ver y hacer entre sus históricas calles. Lo que antiguamente fue la cuna de civilización, se ha convertido en una mezcla de historia y ruinas, arte cautivador y una animada vida, además de un centro gastronómico que deleita a cualquiera.
En su centro histórico, delimitado por las murallas aurelianas, existe la mayor concentración de bienes históricos y arquitectónicos del mundo. Además, es el corazón de la religión católica y la única ciudad que contiene otro estado en su interior: la Ciudad del Vaticano.